domingo, 31 de julio de 2016

Carriladas en la Serra del Porquet



En los alrededores del Camino Viejo de Elche, entre el barranc dels Flares y San Gabriel, partida rural de Bacarot en el término de Alicante, hay un conjunto más que interesante de carriladas, un viejo camino supuestamente íbero que se conserva en un entorno más que degradado, aunque pese a ello parece que se han podido localizar canteras y restos de poblamiento de la época. Dado que las crónicas dando cuenta de carriladas están en este blog, aunque algunas caen fuera del término municipal como las de la Cochera, en el camino viejo de Aspe, las de Agua amarga, también en el término de Alicante y las del Molar a caballo entre Elche y San Fulgencio (aún pendientes de citar aquí) pues aquí van. Lo cierto es que este blog se hizo mayor a partir de mis salidas para describir y ubicar las carriladas en la roca repartidas por nuestro término. Pero es que además diré que fue Ferrán Arasa planteando tal posibilidad el germen de la serie de entradas dedicadas al tema, así que como en la época no habían delimitado territorios en comarcas ni términos municipales, me permito la licencia de publicarlo aquí.

Els camins antics de la partida de Ferriol d’Elx (El Baix Vinalopó)  / Ferran Arasa i Gil en LUCENTUM XXVIII, 2009, p. 75-90:
Un detalle añadido del mismo autor:
Topografía de les restes de camins conservades a la partida de Ferriol d’Elx (El Baix Vinalopó), / Ferran Arasa i Gilen Saguntum, 39 2007, p . 165-166

Conocí la existencia de las mismas a través de la tesis doctoral de Morote Barberá: La Via Augusta y otras calzadas en la Comunidad Valenciana

 y un artículo-resumen del mismo que pude obtener primero fotocopiado y después en su formato original impreso para intentar ver las fotografías al máximo detalle posible y determinar el lugar en el que aparecían las carriladas, allá por el 2012. 
José Guillermo Morote Barberá


Texto completo
Una de las fotografías, ahora lo sé, era precisamente del tramo ascendente de la Serra del Porquet. 


Finalmente, gracias a la entrada dedicada en  Partidas rurales Bacarot pude localizar el paraje. 

La tesis doctoral de Morote integraba estas y otras carriladas en la Vía Augusta o alguno de sus ramales. Ahora sabemos que la ingeniería caminera romana no incluía caminos carreteros sobre la piedra desnuda en un solo carril como vemos; más bien podemos afirmar que desde los romanos, los caminos fueron hechos permitiendo el cruce de carros sin necesidad de mayor artificio (ancho mínimo de 3 m.) y digo yo que esa es precisamente una de las características básicas que distingue una de otra. En el Castellar de Meca, la obra más acabada y estudiada de la ingeniería ibérica aparece un camino tallado en la roca en un solo sentido, que incluía entre otras cosas apartaderos, lugares diseñados para permitir el paso de carros en sentidos opuestos. 

Otro de los rasgos básicos de la ingeniería ibérica es que podía incluir el fondo de los barrancos como lugares de paso de su camino (y aquí hay que tener en cuenta que el rozamiento de las ruedas en la piedra es bastante menor que cualquier superficie blanda) cosa poco o nada frecuente en la caminería romana, que suelen sobreelevarse sobre el curso de las aguas. Un tercer rasgo distintivo es que mientras el camino romano se fabrica mediante una capa superior de gravilla y arena compactada, relativamente fácil de reparar y mantener, el camino íbero va hundiéndose progresivamente por el paso de los carros y obliga a "obras de mantenimiento" peculiares. Aparecen así caminos que terminan excavados en trincheras, sucesivamente ensanchadas para permitir que los carros y la carga no tropezaran con la piedra circundante. Con todo, el elemento definitivo está relacionado con el ancho de eje de los carros o la huella que dejan en la piedra. El eje romano tiene alrededor de 1'40 m. de centro a centro de rueda, mientras que el eje íbero es de apenas 1'20 m., lo que hace materialmente imposible circular a los carros romanos sobre los caminos supuestamente íberos. Aunque hay más diferencias de detalle, hoy nos quedaremos aquí. Quienes hayan tenido la paciencia de observar el material gráfico incluido en las entradas podrán observar estos detalles y otros. 
Volviendo al tema. Aunque tengo pendiente más visitas de detalle en la zona, para observar la relación del camino con el yacimiento ibérico de Colmenares,  y la relación entre este camino y los caminos de Saladas, tenemos al menos: 


Camino principal. Profundas carriladas y centro rehundido por el paso de animales de tiro

un camino principal, entendiendo como tal a una carrilada limpia y completa que se presenta excavada en la piedra a cierta profundidad, con un rehundimiento central en el centro de la carrilada debido al paso de los animales de tiro. Este camino principal parece provenir del llano y dirigirse a la costa. En Agua Amarga aún pueden verse huellas de carriladas.

Al menos un  camino menor si nos atenemos a la profundidad y detalle de las carriladas, que se prolonga a lo largo de la línea de cresta de la Serra del Porquet. Las huellas no son tan profundas y el paso de animales ha dejado marcas superficiales
Un apartadero, similar en todo a los del Castellar de Meca, siendo posible seguir el desdoblamiento de los carriles, hasta aparecer dos pares de carriladas separadas y delimitadas y su posterior confluencia para volver a unirse y formar un solo par. En el término de Elche el camino del Barranco de San Antón presenta al menos dos de estos apartaderos y el camino de Saladas también.
A lo lejos pueden observarse dos pares de carriladas
Punto de unión de dos carriles. Final del apartadero
Punto de extracción de piedra junto al camino




A lo largo del recorrido aparecen puntos de extracción de piedra que se explican precisamente por la mera presencia del camino en una época en la que la piedra es el principal material constructivo, sin que hasta hoy haya podido ver alguna cantera capaz de explicar por sí misma la presencia del camino, algo que sí que pasa en el caso del Barranco de San Antón y en el de Saladas. Pasados los calores volveré sobre el lugar.

Dos entradas dedicadas al camino en Rutas Arqueológicas por Alicante 
http://arqueologiaalicante.blogspot.com.es/2016/03/calzada-antigua-de-la-sierra-del-Porquet.html

http://arqueologiaalicante.blogspot.com.es/2016/03/hipotesis-sobre-la-antiguedad-la.html

sábado, 23 de julio de 2016

El yacimiento "Els Xops" en el Aigua dolça i salà



Acabamos de enterarnos por la prensa y otros medios de comunicación de la existencia de una nueva excavación arqueológica en el entorno del Aigua dolça i salà, un lugar preñado de restos y de yacimientos, algunos de importancia como se verá. Los responsables de la excavación tuvieron la excelente iniciativa de preparar una jornada de puertas abiertas, apenas dos días antes de dar por concluida la campaña y proceder a su sellado, así que aproveché la invitación y a las 10 de la mañana del 21 de julio visité el lugar y recibí las oportunas explicaciones del personal que muy amablemente nos atendió. Lo que sigue es una crónica de la visita y una valoración provisional y personal de alguien poco entendido en estas materias, algo a lo que últimamente, no se si por suerte o por desgracia, tengo acostumbrados a los que me siguen.
Fragmento de Opus signinum

En las noticias ya se anunciaba lo que posteriormente pude ver: un asentamiento rural cuyo origen puede estar entre el final de imperio romano y la invasión árabe; un largo periodo del que apenas se tienen noticias fidedignas aparte de lo que aporta la arqueología, por lo demás también escasa. Se presentan restos de unas modestas dependencias no habitacionales por la escasez de restos cerámicos y utillaje encontrados, probablemente relacionadas con algún punto fortificado como la Moleta, es decir que quienes los hicieron harían vida en el interior del recinto fortificado mientras que parte de las tareas productivas se llevarían a efecto en el lugar, en consonancia con la inseguridad característica de la época tras los saqueos de Roma en el S. V, el fin del imperio de Occidente, la ocupación y probable saqueo de Ilici, temporalmente recuperada para el Imperio de Oriente y de nuevo perdida en una época convulsa... 
En definitiva por todas partes la gente abandona el llano y las ciudades por emplazamientos en altura más fácilmente defendibles. Mientras tanto la vida productiva debe seguir haciéndose allí donde es posible y eso es lo que se ha encontrado, dependencias probablemente productivas, además de un horno, en la ladera del Vinalopó en un emplazamiento que me parece fundamental pues se ubica por debajo de la Sèquia Major y aunque no se ha encontrado una relación directa con lo excavado, si han llegado a aparecer fragmentos de opus signinum, (V. Plinio El viejo), material impermeabilizante que los romanos empleaban en las conducciones de agua y en los depósitos para almacenarla. Salta de nuevo a la palestra la vieja tesis de D. Pedro Ibarra y Ruíz acerca del origen romano de la Sèquia Major, ante la proliferación de tesis y estudios que dan por supuesto el origen musulmán de dicha infraestructura hidráulica y en general del sistema de riego, obviando detalles esenciales como que los ramales de la Sèquia Mayor se abren en abanico precisamente alrededor de La Alcudia, como en su día puso de manifiesto Carmina Verdú, adaptándose además a la centuriatio y a los lotes de reparto de la tierra. Si a ello añadimos la presencia de dos termas en su interior, que requieren un aporte permanente de agua, antes de plantear el origen andalusí hay que proporcionar alternativas válidas que expliquen como se abastecían de ella los romanos. La adaptación de un sistema de riego preexistente por parte de los andalusíes incluso hasta conformar un sistema peculiar de aprovechamiento del territorio como la agricultura de oasis, explica lo realizado por ambas civilizaciones; la atribución a los árabes del riego local deja en un inexplicado e incómodo limbo a la ciudad romana y a las villae que proliferaron a partir de la división y reparto en lotes entre los legionarios y más cosas, pese a las evidencias.
Excavando el horno
Con todo, hay un segundo elemento que la excavación pone de manifiesto, que me parece de tanta trascendencia al menos como lo dicho hasta ahora. La Moleta como asentamiento a partir del cual se hace posible el aprovechamiento y uso del territorio circundante ve incrementada su importancia histórica, algo que algunos investigadores ya han puesto de manifiesto; en primer lugar, como La Alcudia o El Castellar, ofrece restos que indican un poblamiento continuado desde el Neolítico al menos hasta la dominación árabe. Algunos llegan a afirmar que debe ser uno de los poblados de la Edad del Bronce más extensos de nuestra comunidad y desde aquí hemos remarcado la necesidad de excavaciones sistemáticas, entre otras cosas porque a la luz de lo ahora excavado su conocimiento permitiría despejar la incógnita de si estamos ante la mítica Tarsa o no.

En mi opinión, se produjo entonces la alianza de ambas fuerzas, formalizada a través de un emblemático matrimonio mixto: el del ğundí ‘Abd al-Ğabbār b. Nadīr con la hija de Teodomiro, quien otorgó dos alquerías en concepto de dote matrimonial: la de Tarsa a unas tres millas de Elche y la de Tall al-Ḫaṭṭāb, el Cerro o colina de Ḫaṭṭāb, a ocho millas de Orihuela, probablemente identificada con el despoblado del Cabezo Pardo o de las Fuentes, en Albatera... (Sonia Gutiérrez Lloret)

Para esa alquería se han planteado al menos tres localizaciones que yo conozca además del emplazamiento actual de Elche: una ubicación indeterminada a partir de la toponímia (Algoda) recogiendo la hipótesis de Mª Jesús Rubiera, El Castellar que está a 3 millas de la actual ciudad (las fuentes no indican si se refieren a la Ils previa a la fundación o al emplazamiento actual) y La Moleta, a 3 millas de la vieja ciudad romana. Por eso el hecho de que se acredite en su inmediaciones la presencia de elementos tardorromanos y visigodos como los excavados, viene a ser un argumento adicional de peso para que Tarsa sea este emplazamiento. Y más cosas que iré diciendo.






Desde aquí mis felicitaciones a todos, en especial a los integrantes del Aula Arqueológica de la UNED de Elche, por la excelente labor de investigación que están llevando a cabo.

martes, 12 de julio de 2016

L'Encarnella entrega / La alcachofa entera

Hay entradas que no tiene precio porque además de poder fabricarlas casi sin esfuerzo, son agradables de leer y permiten aliviar algo "el caloret de l'estiu" Como diría nuestra ínclita Senadora. Lo de la fácil redacción viene porque me limito a trasladar aquí el contenido de un correo de Gaspar Jaen i Urbán en el que comenta y nos proporciona la dirección de descarga de la no menos ínclita revista satírica local La Encarnella, que hizo las delicias de muchos ilicitanos en su periodo de vigencia, así que sin mas:
amigues i amics,
ara, l'encarnella escanejà es pot veure tota entrega, encurios i desenmascarada al repositori de la universitat d'alacant.
entre l'avorriment generalitzat que envaiex europa fareu un fart de riure.
salut i amistat. gaspar

http://rua.ua.es/dspace/handle/10045/56605

Resumen, de la ficha RUA (Repositorio institucional de la Universidad de Alicante)
     L'Encarnella es el título genérico de una publicación satírica editada en Elche (Alicante) entre 1983 y 1984, dentro de una tradición de revistas satíricas valencianas que se remonta al siglo XIX. Se editaron seis números. No constaba el número de página, aunque las mismas oscilaban entre cuatro y ocho. Tanto los textos (escritos mayoritariamente en castellano, y más ocasionalmente en valenciano -catalán dialectal y subdialectal) como los dibujos aparecían sin firmar, ya que los autores permanecieron en el anonimato en todo momento. Todos los números de la revista contaron con Depósito Legal. El titulo ("L'Encarnella") es un sustantivo dialectal del catalán utilizado en Elche para denominar la "alcachofa", "carxofa" o "alcacil" (fruto de la planta cynara scolimus). Como suele ser habitual en el periodismo y en el teatro satíricos valencianos, se trata de un término que tiene una connotación sexual referida al sexo femenino. Cada uno de los seis números editados tenía un título, dos subtítulos y una numeración específica. En todos los casos el segundo subtitulo era "(La revista de la gente bien)" y en cinco ocasiones se imprimió con una cabecera basada en un dibujo expresionista alusivo al fruto del título. Se imprimía a una tinta sobre papel blanco, cambiando en cada ocasión el color de la tinta. La imprenta fue en las seis ocasiones "Gràfica Punt i Ratlla. Elx", extremo que se hizo constar siempre en la portada de la publicación. Las dimensiones fueron siempre 420 x 295 mm. En tres ocasiones se incluyó un encarte.


Descripción: "L'Encarnella", revista satírica. Coleccion completa de seis numeros. 1983-1984: Número 1: “L’Encarnella entrega. Fulla oligofrènica per als bufats”, núm. 1.001, abril 1983. Tinta de color verde-gris oscuro. 4 p. + un encarte impreso a doble cara de 22 x 16 mm. Dep. Leg. A-229-1983. Número 2: “L’Encarnella encarnà. La revista més oberta per al lector més estret”, núm. 2.001, junio 1983. Tinta de color rojo vivo. 4 p. + un encarte impreso a una cara de 420 x 295 mm. Dep. Leg. A-514-1983. Número 3. “L’Encarnella festera. La fulla de got i punyal”, núm. 3.001, agosto 1983. Tinta de color morado oscuro. 4 p. Dep. Leg. A-714-1983. Número 4: “El rabo de l’encarnella. La fulla més verda per al lector més morat”, núm. 4.004, octubre 1983. Tinta de color verde brillante. 4 p. Dep. Leg. A-843-1983. Número 5: “Encarnelles blanques. Extra de navidad… con cotillón sorpresa. La revista que no produeix ressaca”, núm. 5.005, diciembre 1983. Tinta de color azul-negro oscuro. 8 p. + un encarte efímero consistente en un puñado de confetis sueltos de colores que le caían encima al lector cuando abría el ejemplar. Dep. Leg. A-1097-1983. Número 6: “L’Encarnella rostía. La fulla que no falla”, núm. 6.006, marzo 1983. Tinta de color azul oscuro. 4 p. Dep. Leg. A-164-1984.

URI: http://hdl.handle.net/10045/56605

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Nota del blog: Imagenes aportadas `por la dirección de la revista al tuntún.

miércoles, 6 de julio de 2016

Algezares y calera en Vallongas


Para empezar decir que el nombre de calera se utilizapara designar tanto los hornos tradicionales de yeso y los dedicados a la producción de cal. El término además comprende tanto aquellos hornos destinados a un uso temporal o estacional generalmente construidos ex profeso cerca de la obra en la que se va a utilizar o en las proximidades de un camino, como los artefactos de carácter permanente previos a los hornos industriales, ubicados justo al lado de los puntos de extracción del mineral, asociados a empresas dedicadas a la fabricación y venta de sus productos. De ambos tipos tenemos aún restos en la comarca.
La partida rural de Vallongas acumula gran cantidad de puntos de extracción  de yeso (algezares) como puede comprobarse en el mapa de sombras de Terrasit, con hoyos irregulares de mayor o menor tamaño alineados preferentemente en sentido E-W sobre las vetas ricas en mineral. La cruz  del mapa que encabeza la entrada indica el emplazamiento de restos de una calera en los alrededores de lo que hoy son las ruinas de una casa probablemente asociada a la actividad de extracción.
Un tamarix gallica en uno de los algezares, algunos tienen agua todo el año.
Agua al fondo del algezar





Marcas de barrenado en las vetas de yeso
Panorámica general del paraje, con la casa en ruinas y a la derecha los restos de la calera


Detalles de las ruinas
Las caleras tradicionales son una adaptación del horno moruno, en el que la parte superior de la cúpula o falsa cúpula se construye con la misma piedra que va a ser horneada, de manera que uno de sus rasgos distintivos es presentarse "descabezada" con paredes relativamente gruesas para facilitar la carga del mineral; no es frecuente que presenten, salvo en las caleras permanentes, cámara de cocción separada y además suelen ser de diseño circular,con perfil de semicircunferencia achatada excavada parcialmente o adosadas a algún talud para minimizar la pérdida energética de la combustión. Pueden presentarse revocadas con una mezcla refractaria, generalmente mediante un recubrimiento ligero de arcilla y yeso que se debe reponer o reparar casi tras cada uso. Los hornos artesanales de cocción del mineral de yeso vienen a ser semejantes, auqne presentan algunas diferencias pues la intensidad de la cocción suele ser menor, por lo que en ocasiones presentan chimeneas adjuntas y formas de horno "de botella" como las Yeserías de Román que aún se conservan en la Avenida de Novelda.
El vídeo lo he tomado de un apunte de Javi Falcó en Facebook

1. Caleras ya presentadas aquí.
De Caramoro. En una entrada anterior, a indicaciones de Juan Pascual en las inmediaciones del Aigua Dolça i Salà restos de una construcción en piedra que resultó ser una calera, por su forma, localización, etc. Para terminar de dibujar la conexión histórica me faltó añadir las citas que expresamente D. Pedro Ibarra hace sobre el uso de la cal en la Acequia Mayor: ... "y el dia que conducirá algun forn de cals percibirá dos sueldos..." en referencia al cargo de Obrer de sèquia, [1], indicando además que "trabajará con 4 peones para arrancar y transportar la piedra para la cal", así que si añadimos el emplazamiento (Caramoro), en un paraje que ha requerido continuas reparaciones tanto de la Acequía Mayor como de la conducción de agua dulce del Obispo Tormo, en especial los tramos tunelados (que debieron efectuarse en la primera mitad del XX) probablemente sean la causa concreta de su ubicación y existencia.
La calera de Román, en las inmediaciones en el PNM los Algezares de Aspe, en medio de una sucesión de aljezares (o canteras de yeso) en el margen izquierdo del Vinalopó. con restos de la cámara de cocción de un horno que es posible que se utilizara junto a aparatos de trituración del mineral a tenor de la sobreabundancia de restos de cribado. Hay que relacionar estos aljezares con lo que se conoce como "Yesería de Román" en la Avenida de Novelda, justo enfrente del ambulatorio San Fermín que conserva, afortunadamente sendos hornos de yeso de botella. Ya aparece marcada como calera en el mapa de Elche de 1931 del IGN y en los mapas parciales preparatorios con fechas de finales del XIX.
Vista aérea de la Yesería de Román. Hornos en forma de botella
2.- Caleras recientemente localizadas
Calera de Vallongas
Estamos ante un artefacto construido en las inmediaciones de los numerosos algezares y puntos de extracción de yesos, merecedor de una investigación más detallada. Los restos de la calera se presentan próximos a las ruinas de una casa probablemente relacionada con el horno y las canteras. No puedo precisar más detalles de los aquí enumerados porque en mi última visita el lugar estaba vallado y no me fué posible contactar con el propietario; no obstante la información que proporcionan las fotografías es suficiente.












El exterior se presenta rodeado de un muro perimetral probablemente para evitar pérdidas de temperatura 












Interior de la calera.Presenta unos dos metros de profundidad, mientras que el exterior, sobre el perimetro sobreelevado, mide aproximadamente 1'20 m.



Abertura de carga


Recubrimiento interior calcinado
Calera del Barranco del Grifo
En una ubicación similar a Caramoro por su proximidad al punto en el que se utilizó el yeso, tenemos restos de una calera. Debo su localización a otro de los colaboradores habituales del blog, Adolfo Quiles. 
Esta otro día.
[1] Estudio acerca de la Institución del riego de Elche … / Pedro Ibarra y Ruíz, -- Elche : Ayuntamiento, 2003; ed.  fács de Madrid, Establecimiento tipográfico de Jaime Ratés, 1914