viernes, 28 de agosto de 2015

Ensimismado por las Damas de Elche (y 3)

Las fotografías de la Dama de Elche que presentamos hoy proceden de la Fototeca de la Universidad de Sevilla, compuesta por 79983 fotografías de más de 130 fotógrafos que se presentan digitalizadas en acceso libre, cosa poco frecuente en la red de Bibliotecas Universitarias, que suelen requerir identificación para el manejo de sus fondos en cualquier soporte y formato. El hecho de que en su origen se concibiera como un archivo y laboratorio fotográfico al servicio del estudio de la disciplina de Historia del Arte a partir del empuje del profesor Antonio Murillo Herrera desde 1907, que pronto se vio continuamente aumentado por donaciones  y adquisiciones explica ese carácter abierto y que buena parte de su contenido sean reproducciones de patrimonio artístico y monumental de Andalucia. 

Pese a ello, si efectuamos una búsqueda por la palabra clave “Elche” aparecen 13 registros de los cuales 3 están dedicados a la Basílica de santa María, una al Ayuntamiento  (las 4 del fotógrafo sevillano Antonio Palau con fecha 1962, que presentaré otro día) y el resto a la Dama de Elche procedentes salvo alguna excepción, de lo que se conoce como Archivo Más, un enorme y valioso conjunto de fotografías efectuadas por Adolf Mas Ginestà  algunas muy conocidas y otras no tanto. 

Como detalle a mejorar en la presentación de las fotografías digitalizadas, la superposición de marcas de agua afea el producto,y como humilde recomendación el modelo de marca de la Cátedra Pedro Ibarra me parece excelente.
¿Y las fotos de la Dama?. Simplemente decir que resultan deslumbrantes no solo por la calidad de la modelo; se nota que el fotógrafo ha manejado acertadamente la luz y los planos para obtener resultados óptimos. Tanto es así que en su día se tomaron como matriz para la calcografía de la peseta y el sello de la Dama, como podemos comprobar.


Una interesante descripción del archivo fotográfico de la Universidad de Sevilla puede verse aquí:

Detalle la parte trasera del busto con la urna cineraria


La Dama es única o hace únicos los objetos que la representan. Resulta que este billete de la República Española, dedicado a Elche y que no llegó a circular es en opinión de los coleccionistas el más cotizado y esperado.


Anverso y reverso del billete republicano, 

No ocurre lo mismo con las famosas pesetas y los sellos, abundantes.


En esa línea la Cátedra Pedro Ibarra proporciona un interesante sello de 1955 dedicado a Ifni, con una peculiar Dama en representación de una supuesta maternal Iberia acogiendo entre sus manos una caravana, mientras los españolitos de a pie morían a mansalva en esas tierras.

miércoles, 19 de agosto de 2015

Refotografías de Javi Falcó: los alrededores de Santa María

Formando parte del conjunto monumental que rodea la basílica de Santa María y especialmente vinculadas a la celebración del Misterio de Elche, se encuentran dos casas solariegas (la Casa de los Leones, de los Soler de Cornellá y la de los Perpiñán también conocida como Casa Cosidó) que fueron fotografiadas por Loty para su colección de postales; las dos fueron en su día refotografíadas por Javi Falcó y se presentan ahora. Además de formar parte del marco monumental en el que se desarrolla la entrada de actores y autoridades en el Misteri, estamos ante dos excelentes ejemplos de sedes de la nobleza local, linajes que jugaron un importante papel en la historia local y que han sido estudiados en profundidad bajo diversas perspectivas, pues sus miembros intervienen continuamente en diversos ámbitos de la vida local, en algún caso hasta bien entrado el XIX.

Loty superpuesto sin transparencias sobre la fotografía de Javi Falcó



 En ambas pueden apreciarse las profundas transformaciones operadas en algo menos de un siglo en los propios edificios y en el entorno inmediato de la basílica y así podemos hacernos una idea aproximada de la intervención de Serrano Bru sobre la casa de los Soler de Cornellá en la década de los 50 (se le añade una altura y nueva rejería). En la casa Cosidó lo que se hizo en la segunda mitad de la década de los 70 del siglo pasado, fue conservar solo la fachada a la que se le añadió un importante volumen de edificación y numerosos detalles en el exterior además de la rejería. Las ménsulas originales se reprodujeron a lo largo de las cornisas de todo el edificio y sirven para dar cierta unidad al conjunto que forma con el nuevo edificio sede de la Mutua y la actual plaza que sustituyeron el espacio ocupado por el portalón y la casona del colegio de La Asunción.


sábado, 15 de agosto de 2015

Elche: La ciudad industrial del siglo XXI / Josep Antoni Ybarra

Mientras desde lejos veía la Nit de l’Albà en lo alto de la Peña de las Aguilas, donde todo parece pequeño y apenas se escucha el estruendo, desde suficiente distancia como para percibir el cielo nocturno sobre nuestra ciudad como una sucesión de excelsas miniaturas y panorámicas pintadas de luz y color, me llegó un aviso al móvil: un correo de J. A. Ybarra. Siempre son interesantes así que me permití el detalle de mirar por encima su contenido, en definitiva la presentación de la revista Saò en Elche. Dejé para más tarde (o sea, hoy) analizar su contenido; al final ha resultado ser una ofrenda esperada desde hace tiempo y tanto que ha terminado siendo casi tan sorprendente como si fuera una novedad, como uno de esos artificios de fuego que se lanzan desde las terrazas; apenas se adivina su trazo pero sorpresivamente termina siendo una brillante palmera dorada que deja impresa en el cielo y en  nuestra retina un dibujo efímero de la palmera terrenal.
Me explico: hace algún tiempo Josep-Antoni me pasó un par de artículos inéditos dedicados a diseccionar Elche a partir de su economía, de los cuales uno se publicó aquí en su día (bajo el título Arribarà la 4ª revolució industrial al Pais Valencià?) y el segundo se presenta ahora. Había que esperar a que se publicara y el correo recibido indica que el segundo artículo, el más interesante para mí,  ya ha aparecido en Saó[1]. Decir que se aborda nuestra ciudad desde una perspectiva en el que él es una autoridad, aportando un enfoque fundamentado en la tesis del distrito industrial de Marshall y la economía sumergida para terminar planteando, como expresamente se dice aquí y ahora que nuestra comarca y por extensión el sur de la provincia de Alicante es, además de un modelo de industrialización dispersa alternativo al oficial, un laboratorio social y económico a gran escala (desde hace ya un montón de tiempo) en el que se prueban mil y una formas distintas de producir mercancías para terminar siendo algunas de esas pruebas vías o soluciones exitosas para el sistema.  Pese a la sencillez de su contenido (cualquiera puede leer y entender lo que más adelante se dice) me atrevo a augurar que cualquier análisis al nivel que sea (ya se sabe, económico, social,… pero también cultural, histórico y hasta si me apuran, arqueológico) de nuestra ciudad y su entorno, si quiere ser riguroso y operativo, tiene que  empezar desgranando las implicaciones de lo aquí escrito; incluso me atrevo a afirmar que no se entiende Elche si no se parte de las premisas enumeradas, y no se entenderá si no se adoptan medidas encaminadas a favorecer la proyección final del artículo. Por eso aquí va en una traducción casi a vuelapluma y por ello arriesgada así que de sus errores y aciertos soy totalmente responsable:

Elche: La ciudad industrial del siglo XXI / Josep-Antoni Ybarra. Universidad de Alicante

Nos resultaba difícil de entender. Habíamos leído, habíamos hablado, habíamos constatado muchos aspectos de la Revolución Industrial (la inglesa, la conocida); conocíamos sobre procesos industriales, sobre el maquinismo, sobre las clases sociales, sobre el poder de la burguesía y de la banca, sobre la lucha de clases, sobre la propensión al cambio, sobre la modernización, sobre todo lo que la revolución industrial teóricamente debería haber supuesto. Hasta ese momento, todo eran escritos y libros. Sin embargo, para interpretar y conocer a nuestra ciudad nos encontrábamos con muchas carencias teóricas e interpretaciones erróneas. Hasta que por fin caímos en la cuenta de que esto no era Inglaterra; estábamos en el País Valenciano y concretamente en el sur, en Elche. Los modelos teóricos se pueden replicar, pero no siempre sirven para interpretar acertadamente cómo funciona la realidad.
Imagen del Parque industrial de Torrellano. Fuente: Servicios La Verdad
Y así es como había que entender nuestra industria, nuestro proceso de industrialización, la palanca que impulsa todo cambio social y político en Elche, se apoyaba sobre tres aspectos: la tradición, la pequeña empresa y el trabajo disperso. Los tres en un marco teórico de la revolución industrial clásica eran aspectos marginales e insignificantes, sí, pero no en Elche, no para interpretar la industrialización del sur.
En el sur, el modelo de industrialización es inexplicable sin la pequeña empresa, sin el capital social y sus relaciones, sin el conocimiento acumulado en la gente y disperso en el territorio, sin una movilidad social no determinada por las clases sociales, sin el trabajo productivo de las mujeres, sin la deslocalización de las tareas y del trabajo. Todos estos aspectos eran desconocidos, puede incluso que estuvieran escondidos, en la interpretación de en qué consistía la industria del sur valenciano. Y ahora resulta que es sobre estos aspectos sobre los que se ha podido construir todo un modelo de desarrollo económico, De esta forma, hay que señalar que son pocos los pueblos que pueden escribir su propia historia, pocos los que pueden contribuir a dar forma a un modelo de desarrollo. En este caso, un modelo de desarrollo fundamentado en la pequeña empresa, en la tradición y en el trabajo; Elche y el sur valenciano lo pueden hacer de forma singular y destacada.
Polígono industrial de Carrús. Fuente Diario Información
Y el tiempo continúa dándonos la razón. Elche y el Sur valenciano es al mismo tiempo un observatorio y un laboratorio singular y destacado para el capitalismo donde se hacen todo tipo de pruebas. En principio hay que decir que Elche es la “ciudad industrial” por antonomasia del País Valenciano; según los indicadores que tenemos a nuestro alcance, el potencial industrial de Elche, es el segundo del País valenciano, tan solo un tercio por debajo del de Valencia ciudad, ciudad que multiplica por 4-5 el número de habitantes de Elche y que no se puede decir que sea una ciudad industrial. El conglomerado de pequeñas y medianas empresas que se concentran solo en Elche (más de 15.000 negocios de todo tipo) hace que las que son industrias estén alrededor de los 2100, de las cuales, las que se dedican al calzado superan las 800. Se identifica de esta forma a Elche como la ciudad zapatera más importante de todo el Estado español. ¿Y que hacen estas empresas?. Y ahora viene el observatorio..., hacen las mil maneras de hacer zapatos diferentes al menor coste posible. Por eso, se apoyan unas en otras; unas llegan a hacer una parte del zapato, otras unos componentes, otras los ajustan, otras los acaban, otras los venden, y así apoyándose unas en otras, el producto, al final, sale al mercado. Pero en este gran campo de relaciones de competencia y de cooperación, tratan de hacer pruebas, como si fuera un laboratorio para ver cómo sacar zapatos más baratos o/y diferentes: así a veces se han ido a hacer zapatos a los alrededores de Elche, a la zona agrícola y próxima del Bajo Segura con tal de pagar un salario inferior; otras veces lo que han hecho es  irse fuera, a China, a La India, por Asia, a hacer lo mismo; ahora están decididos a volver a hacer los zapatos integramente en Elche, por aquello de poder servirlos con más rapidez en los mercados que tienen cerca, Europa, cambiando muy a menudo de modelaje y la demanda, cosa que resulta difícil de compaginar si los que hacen el trabajo están tan lejos como China (el tiempo que tardan los zapatos desde que se pueden hacer en China –a precios bajos- hasta que llegan a los mercados europeos hace que se pierda la “novedad” de la moda).
Fuente Diario Información. Ilustración de una noticia sobre desmantelamiento de talleres clandestinos en Elche y Novelda
Dentro de este laboratorio que es el complejo productivo de Elche, se ha utilizado según intereses y de manera más o menos intensa, la descentralización y/o la deslocalización de la producción, y siempre gestionando la mano de obra, el trabajo directo, con la desregulación. Así, se ha visto como la máquina de producción de Elche es un modelo donde el  trabajo es mayoritariamente irregular –eso que ahora está tan al día, trabajar a tiempo parcial y solo cuando la empresa lo necesita- ; el trabajar sin seguros sociales, clandestino, en negro, el hacer de emprendedor –lo que es la manera más elemental de autoexplotarse- ha sido una de las formas más tradicionales que había en Elche de independizarse de la fábrica donde se trabajaba y uno se montaba su “fabriqueta”; el apoyo de la familia en temas de médicos, de Seguridad social, de consumo, de capital... Todo eso que hoy se está introduciendo en el mundo de las relaciones sociales e Industriales, ya lo habíamos probado en Elche hace algunos años. Como consecuencia, la demolición del Estado del Bienestar ha tenido una prueba evidente en Elche cuando una parte fundamental de su mano de obra, la que ha hecho levantarse a la industria, no tiene ningún derecho a tener prestaciones una vez que esa mano de obra ha llegado a la jubilación. Nos referimos a que alrededor de 15.000 mujeres que pueden estar viviendo hoy en Elche y que pueden haber trabajado de forma intermitente en el calzado, no tienen derecho a recibir ninguna prestación de jubilación más allá de un 5 % de ellas. ¿La razón?, porque han trabajado en negro; nunca se las ha querido dar de alta en aquel sistema productivo aunque lo hubieran pedido; compatibilizaban su trabajo como amas de casa con los de la fábrica y lo hacían en casas particulares o en escondites (casas de campo, almacenes, pequeños tallercillos). Si hablamos de los nombres, su cotización nunca ha estado de acuerdo con sus salarios, siempre ha estado por debajo; entonces, ahora mísmo los jubilados reciben prestaciones ínfimas en relación  a lo que han trabajado. En realidad Elche ha sido eso, un complejo organizativo de trabajo para comer y vivir y vivir y comer para trabajar. ¿El bienestar? ¿El desarrollo? El bienestar y el desarrollo se llamaba consumo, gastar hoy, tener deudas y poder pagarlas. El corto plazo es la guía, y el día a día el horizonte en el que Elche se ha movido. De ahí que las crisis, cuando llegaban, y es cierto que llegaban, eran muy fuertes, y se notaban a todos los niveles. En el 2012 un tercio de la población ilicitana dada de alta en la Seguridad social estaba parada oficialmente; cerraban las fábricas, los talleres y los negocios de al lado; todos a la vez. ¿Y con este nivel de paro como se vivía?. Se vivía porque en realidad se abrían otras, donde nadie se imaginaba: almacenes, pequeños talleres, casas y bajos, pero eso sí, en condiciones cada vez peores. Es impactante ver en el viario de Elche la intensidad de tráfico que soportan las carreteras y caminos que entran o salen de la Ciudad un día entre semana a horas punta como es a medio día –la hora de comer-; un montón de coches, furgonetas, camionetas, motocicletas, que cargan a la gente y a las mercancías, desde “defora” a los almacenes de los polígonos y a las casas del pueblo (podemos hablar de unos 4000 vehículos y de 12000 personas que se mueven en una hora escasa, y que de nuevo a la hora arrancan otra vez para ir a trabajar). Todo eso es el trabajo disperso que rodea Elche y que en un tiempo récord se concentra en la ciudad, para volver a la hora a distribuirse alrededor. Puede ser sorprendente y maravilloso, pero muy costoso y fatigante.
Y al hablar de consumo, al margen de lo que representa para la ciudad en si su vertiente comercial y su inclinación consumista a veces desorbitada (como dato al respecto podemos afirmar que a lo largo de los 10 años anteriores a la crisis -1999-2007- se pasó de tener 3 coches por cada 2 familias a que estas mismas familias pasaran a tener 4, es decir, 2 coches por casa de forma generalizada), Elche aquí cumple una función como área de atracción de unas 120.000 personas además de su población (en las comarcas del Medio Vinalopó y Bajo Segura, junto con el Bajo Vinalopó). En total podríamos decir que Elche atrae alrededor de 350.000 personas. Y es eso de lo que se habla cuando se dice que Alicante-Elche podrían hacer de contrapeso a la Ciudad de Valencia y su área metropolitana, generando así una segunda área metropolitana de cierta entidad en el País Valenciano. 
Proyección de viarios sobre imagen satelital del área metropolitana alicante Elche. fuente:
http://www.zonu.com/Europa/Espana/Comunidad-Valenciana/Alicante/Alicante/Satelitales.html 
No obstante, los cálculos son una cosa y las relaciones comerciales y económicas otra cosa bien distinta. Es cierto que  Alicante y su zona de influencia llegan a tener una atracción de más de 550.000 personas (Alicante ciudad y los 14 municipios que gravitan a su alrededor). Esto, junto a Elche y su área de influencia, suma la cantidad de 900.000 personas, número más que suficiente para pensar en desplegar una política común alrededor de comunicaciones, infraestructuras, actuaciones comunes de cierta entidad, etc. Sin embargo, algo hace temblar este armisticio automático entre las dos ciudades, y es que estos dos espacios viven de espaldas uno de otro. No forman ningún área uniforme, ni homogénea ni funcional, ni de atracción de una hacia la otra..., son áreas independientes. Posiblemente si quisiéramos encontrar áreas de cierta funcionalidad en el Sur valenciano hablaríamos mejor de una alrededor de Elche que se alargaría hacia el corredor del Vinalopó, área con una problemática más dirigida hacia aspectos y relaciones Industriales, y una segunda, con Alicante ciudad donde se trataría de engarzar con lo que es una realidad terciaria y turística hasta llegar a Benidorm y la costa. Querer identificar Elche como núcleo turístico –tal y como lo trata de hacer la actual corporación municipal- o Alicante-Elche como área metropolitana es alejarse de la realidad que en cuestiones de economía es la que determina como van a ser las cosas. Elche será una ciudad industrial del siglo XXI y por eso hay que trabajarla, en el paso del XX al XXI. Pensar en cómo será esta industria en el siglo XXI es pensar como será esta ciudad: más descentralizada y a la vez globalizada, dirigida y gobernada por las economías del conocimiento y las nuevas tecnologías, determinada por el medio ambiente y en definitiva abastecida por servicios avanzados. En todos estos cambios es donde están los retos.

Pie de foto de la cabecera. fábrica de calzado en torno a 1950. Cátedra Pedro Ibarra.

Visita todas las entradas de Josep-Antoni Ybarra pulsando aquí


[1] La revista publica los números y artículos en digital con cierto retraso, pasado el periodo de vigencia. Más adelante, cuando aparezca, se incluirá aquí el enlace al original en digital.

sábado, 8 de agosto de 2015

Històries del meu poble: ELX, L'ELX I LES SABATES / Josep Antoni Ybarra

Recentment s’ha produït a Elx un esdeveniment que res ens ha pogut estranyar: l’agrupament d’un grup d’empresaris d’Elx per salvar l’Elx de baixar i jugar en 2ª B. ¡¡Quina vergonya, quina deshonra!! ¡¡Jugar en 2ª B un equip de la talla i del prestigi de l’Elx!! ¡¡Xe, això no pot ser!! I es així que davant d’aquest disbarat, un grup d’empresaris, recollint el sentir popular, han posat un grapat dels seus diners per tal de salvar l’honra d’aquest equip en una difícil situació. La feina estava (ben) feta. S’ha fet el que es tenia que fer: salvar a l’Elx.  
L’Elx no podia baixar. I es així que la mobilització fou immediata. Ràpidament les comissions aparegueren a tot arreu per fer front a la situació. L’alcalde, el primer, al capdavant de la gran manifestació cívica; les forces de l’oposició, una mica darrere, però allí estaven també; les associacions de festers, les penyes, etc. Tots donant la cara; tots fent paret per aguantar l’Elx. El prestigi de quasi 100 anys d’història, la imatge de tot un poble estava en entredit. I els empresaris fent-se els remolons, perquè n’hi havia que retratar-se amb algun duro, però allí estaven també. Hi havia que donar a l’Elx, ara en problemes, el que l’Elx ens havia donat abans: nom, imatge, prestigi. Anys enrere i com a slogan, algun partit en les eleccions municipals plantejava que una ciutat de primera necessitava un equip de primera; i viceversa. L’idea era que fer pujar l’equip a 1ª, era com pujar la ciutat a la divisió d’honor; mantenir l’equip en 1ª, era mantenir a la ciutat en l’òrbita de les grans ciutats, en honor i en prestigi. I ara, (per raons anti-esportives, segons diuen alguns que no venen al cas) la situació era precisament la contraria, fer baixar l’Elx a 2ª seria com fer baixar la ciutat de categoria. Però el que podia ser pitjor era que baixara a 2ª B; seria massa, com caure en un descrèdit exagerat.

I ara, sense entrar en els perquès de la situació, sense demanar responsabilitats als que han pogut gestionar administrativament i esportivament al club, sense saber massa de les raons esportives o anti-esportives que han fet descendir a l’Elx a 2ª (en realitat a 2ª B), la pregunta que es planteja es: ¿el prestigi, el nom i la imatge d’una ciutat com Elx es mesura per l’equip de futbol? ¿Realment l’esforç de mantenir un equip en primera es mantenir a una ciutat en primera? Voldria equivocar-me, però la resposta no pot ser positiva. Deixe al mon de les escoles, els menjadors infantils, l’assistència mèdica, l’habitatge de la gent, els serveis socials per a persones depenents, els barris marginals, etc. que parlen per si mateix. Ara tan sols vull comentar algunes coses en relació amb el mon del treball i de la principal activitats industrial d’Elx, eixa activitat a la que es dediquen la majoria d’aquests empresaris que han salvat a l’Elx.
Un trabajador pega tacones en un taller ilegal en su casa. / JOAQUÍN DE HARO
¿Que significa el treballar en la sabata en un poble com Elx? ¿Quina imatge te eixa sabata? ¿Transmet una impressió capdavantera, de prestigi, de qualitat, d’innovació? ¿O més be es una imatge impopular, de desprestigi, d’inseguretat, de precarietat, d’explotació? Vostès tenen la paraula, les imatges, les sensacions i les realitats. Ho poden comprovar en els milers i milers de dones sense segurs que continuen treballant en la sabata, en els milers i milers de homes que treballant deu hores al dia, cotitzen, quan ho fan, per una o dues hores. Parlar de salaris dignes, de prestacions socials, de futur, en la sabata es parlar d’utopies. Eixes son les imatges i les sensacions que en realitat transmès el treball de la sabata en Elx. Però això sí, l’Elx s’ha salvat.

I després de salvar a l’Elx (un equip en dificultats), me pregunte on estan les moltes penyes, associacions, regidors, alcaldes, gent de la oposició, i també empresaris, que es posen al capdavant d’una manifestació quan una empresa, o les empreses en general, tenen dificultats o tanquen en Elx. Pensem que una empresa d’Elx, siga la que siga, sempre arrossegarà la imatge del poble. El tancament d’una d’elles no sols significa tancar una font de treball, sinó també el desprestigi i el descrèdit d’un poble que deixa que se’n derroquen les seues empreses. Així doncs, ara per ara s’haurà salvat l’Elx, i amb aquesta mobilització social i col·lectiva del poble d’Elx, ha estat un exemple per rescatar una empresa a Elx. Esperem que quan pugen haver altres situacions d’empreses en dificultats a Elx, tan l’empresariat com aquest poble, també sàpiguen donar-nos bons exemples. D’altra manera, la imatge del poble d’Elx sempre quedarà en entredit.

miércoles, 5 de agosto de 2015

Ensimismado por las Damas de Elche (2)

En una entrada anterior dije que una de las posibles condiciones para el improbable retorno de la Dama era construir un Museo en el que se ofreciera la imagen rodeada de su contexto histórico, arqueológico, etc., algo que se llegó a proponer en el Congreso allá por el 2012, como una delegación o parte de un Museo Arqueológico Nacional descentralizado. Pese a existir dificultades poco menos que insuperables se podía haber intentado para vestir a la Dama en la cesión de 2006 pero lo cierto es que no se hizo; se presentó a los ilicitanos exenta de referencias, sola y aislada, al margen de lo que en su caso debió ser la Dama real, como un objeto de culto, una deidad a venerar; incluso el punto de observación creo recordar que estaba algo sobreelevado. 
En estos días se abunda en el argumentario en torno a la idea del Museo y se llega a comparar con el modelo de Mérida sin caer en la cuenta de las enormes diferencias. Al margen de visiones chovinistas, lo cierto es que Mérida tiene de sobra lo que a Elche le falta: un enorme campo arqueológico a cielo abierto y a la vista con el ropaje fundamental de la ciudad romana: el teatro, el foro, las termas..., lo que explica y sirve de fundamento a las importantes inversiones que se hicieron. Por el contrario aquí, salvo muy escasas excepciones, cada vez que se ha movido una piedra de nuestro campo arqueológico ha sido para terminar haciendo lo que en cada caso se ha querido, removiendo, rellenando con hormigón, construyendo encima, enterrando, etc. Encima nadie parece mirar con cierto detalle el estado de las cuentas públicas y los esfuerzos que tendrían que hacer las diferentes administraciones para llevar a efecto de forma real el traslado definitivo de la Dama, por muy legítima que pueda parecernos la reivindicación; así que personalmente y mientras se designa la comisión encargada de valorar lo que nos puede costar, me conformaría con que el dinero publico se emplee en mejorar la vida de la gente aquí y ahora.
Volviendo a la fascinación personal y colectiva que ejerce el busto, no deja de ser curiosa la utilización de una versión andrógina de la Dama en las fallas de 1929, siguiendo la propuesta de D. Pedro Ibarra quien, para mover polémica recién descubierta propuso que el busto correspondía a un guerrero íbero a sabiendas incluso de que tal opinión era insostenible. Debe observarse además que la falla, enmarcada bajo la Torre Eiffel, recordaba a todos los valencianos que la escultura estaba en París.

Siguiendo en Valencia, cuando en su día se planteó el debate sobre la autenticidad de la Dama de Elche por Moffitt como respuesta fueron desgranándose una serie de argumentos que, aunque por si solos no constituían prueba fehaciente (como sí sería el reciente análisis de los restos de pintura) en su acumulación puntual iban reforzando la autenticidad de la pieza. Uno de ellos era precisamente la similitud formal de los rodetes y otros detalles con el peinado y porte de fallera valenciana, que se pueden ver en fotografías y cuadros de fechas anteriores al descubrimiento de la Dama, remarcando así su profunda raíz mediterránea. Apenas tres o cuatro pasos en Internet proporcionan a  a cualquier incrédulo material que confirma lo dicho. Así que Damas reales tenemos un montón.
En cualquier caso se trata de una escultura que ha ejercido una poderosa fascinación sobre todos, motivo por el cual todo el mundo quiere tenerla y así aunque Damas solo hay una, se han realizado numerosas versiones pretendiendo una copia lo más exacta posible. Ya vimos que Pinazo, además de su versión personal, efectuó una copia literal por encargo, tomando medidas del original del Louvre, siendo por ello una de las más apreciadas; después debe destacarse la reproducción del MARQ, que fundamenta su precisión en el uso de la informática. Una crónica del procedimiento seguido puede verse aquí:

Facsímil  de la Dama en el MARQ
O sea que a día de hoy quien quiera ver lo más parecido a la Dama tiene que ir a Alicante, al MARQ en el que además el mundo ibérico está allí representado como un todo.

MATERIAL ADICIONAL
Bajo el título Dama de Elche un óleo de Pedro Antonio Martínez que colgó en numerosas casas de la ciudad como ilustración de calendario.

La adoración de la Dama de Elche. Encargo de M. Serrano, según la Fototeca Digital del Patrimonio

LA DAMA IBÉRICA - Avenida Cortes Valencianas
Obra del artista valenciano Manuel Valdés nacido en 1942. Inspirada en la Dama de Elche, se trata de un monumento de más de 20 metros de altura, realizada con 22.000 cabezas de cerámica vidriada de color azul, con el objetivo de que reflejen los cambios cromáticos de la luz según las horas del día. La obra fue regalada por el escultor a la ciudad de Valencia y fue inaugurada en el año 2.007. Manuel Valdés ha sido declarado hijo predilecto de la ciudad. En la realización de la escultura colaboró el artista fallero Manolo Martí, ya que el interior de la dama está formada por plataformas metálicas de trabajo. 



Un excelente documental: 


Para terminar de desdramatizar el tema, Los asperos, como siempre a la greña, han fabricado su propia dama con demasiadas coincidencias:La Dama de Aspe

Desde la Font de La Figuera:
Fuente: http://paisvalenciaseglexxi.com/2013/06/28/som-ibers-qui-ho-diria/
Y además, un rescate obligado: 
El robo de la Dama. En cumplimiento del anhelo colectivo firmemente enraizado entre los ilicitanos, con ocasión de la visita temporal de la Dama en 2006, El CámaraMan robó la Dama con el propósito de hacerla suya para siempre, no sabemos si con intención de compartirla; afortunadamente dejaron demasiadas huellas, entre ellas un vídeo que sirvió para el inmediato rescate: 


De hecho, las importantes medidas de seguridad para garantizar la estancia del busto fueron motivadas por este material, según dicen los entendidos.

Y mira por donde, hasta Picasso estuvo enredado en el tema del robo de la Dama
Y como muestra de ese deseo irrefrenable por tenerla, un robo, este si, lamentablemente real: